sábado, 21 de noviembre de 2009

Llame Ya



¡Llame Ya!

Algunas veces, queremos usar para una reuniòn ese vestidito que nos queda divino. Ese que exige que de perfil, sì o sì, sólo nos veamos con dos ondulaciones: la de las lolas y la de la cola. Stop. Prohibido que sobresalgan protuberancias a la altura del ombligo y mucho menos, alrededor de la cintura.

Por suerte, el mercado tiene soluciones para todo, como esas milagrosas medias modeladoras push up y slim fit que todas usamos alguna vez. En criollo, son un combo de pantys con faja, que traen una bandas oblicuas que te levantan el traste, un tejido resistente a los lados que te aplasta el llamado “pantalón de montar”, y un sistema de malla compacta que te comprime la panza. Tal como hacía Ultra Sónico, que con sólo apretar un botòn, salía vestida, peinada y maquillada, ahora nosotras, gracias a la push-up-slim-fit podemos lucir como la guacha de Ingrid Grudke, aunque no tan rubias. .

Ahora viene el bajón: la push-up-slim-fit serà maravillosa, ¡pero no es David Copperfield! Y lo que aplasta, comprime y levanta por un lado, no desaparece sino que, invariablemente, sale por otra parte. Y asì, a la altura de la cintura, por arriba de la milagrosa push-up-slim-fit, asoman indeseables que vienen de por allà abajo, y que no tienen porquè estar ahí, donde habitualmente sòlo hay piel y costillas.

Por suerte, los Llame YA nos traen la soluciòn con su sensacional Super Extra Confort fit’n lift. Con ella, no sólo tenemos los contornos de un maniquì, sino que los excesos ya no van a desbordar por encima de la cintura, porque ahì, ¡està la faja que contiene todo! Bueno, pero, ¿dónde termina la faja? Sube, sube y se pierde, tanto que te llega desde el corpiño hasta la rodilla, y es tan modeladora que tus amigas no te reconocen cuando llegàs a la fiesta.

En las anuncios del Llame Ya, hay testimonios, donde felices señoras curvilìneas describen las virtudes de este engendro de nombre impronunciable. Una de las caracterìsticas de los productos de venta telefónica es que son complicados para nosotros, los hispanoparlantes. Imaginen a Mirta de Villa Crespo pidiendo el Power Hair Comb a la operadora, el Super Sweat’n Clean o tal vez el Ultra Cardio Twister. Otra guachada son las fotos: un premio para quien me sepa decir para qué necesita la faja la señorita que ilustra esta entrada. ¡Para que la odiemos!

Pero una vez superada la barrera idiomática, y ya con la Super Extra Confort fit-n lift en casa, la feliz poseedora podrá ir a la fiesta con el vestidito soñado, ya que pasará de la talla 12 a la 4 en cuestiòn de segundos. También se sentirá tiesa como si estuviera embalsamada, y va a transpirar hasta perder 5 kilos (que tambièn quita centímetros, asi que no viene mal). No va a poder probar un solo bocado, y verá pasar el finger food sin inmutarse, ya que la compresión es tal que se corre peligro de que el bocadito se le quede trabado en la laringe.

La vuelta a casa es otro problema. A la hora de despojarse del engendro, a esta altura estará un poco enroscado y adherido a la piel pegoteada por la transpiracion. Si una está sola, cuenta con toda la noche para forcejear. Pero no hay problema: a la larga, sale. Pero si nos están esperando en la cama, habrá que hacer de tripas corazón, ignorar la autoestima y rogarle al marido/novio/amante que tironee para ayudar a sacarnos el disfraz de momia. Y entonces sí, bienvenidos los desniveles naturales de nuestro cuerpo. A ponernos el camisolín, para cantar a viva voz las líneas de nuestro Himno Nacional, ¡Libertad, libertad, libertad!

martes, 27 de octubre de 2009

Ropa egipcia


Como parece que ya se decidió a llegar el calor (¡y cómo!), estoy en plena etapa de terminar de lavar la ropa de invierno, para guardar en cajas en la parte alta del vestidor. Y hay una campera de duvet que me hace dudar. ¿Cómo se lava? ¿Puede ir al lavarropas? ¿Se puede centrifugar? ¿O hay que mandarla a la tintorería?

Busqué entonces la etiqueta con simbolos de las indicaciones, y había cuatro dibujitos:
- una cubeta que dice 40
- una plancha tachada
- un triángulo tachado
- un círculo tachado, inscripto en un cuadrado

No hay que ser Einstein para deducir que en este caso, hay que lavar la prenda a una temperatura de 40 º, y que no se puede planchar. Hasta ahì, todo genial. Ahora quisiera saber qué significan el triangulito y el circulito. Sin duda, como estàn tachados, de eso ¡no se puede!

Me puse a mirar otras prendas, a ver si traían al menos alguna indicación escrita. Las más generosas son "las de la pipa", donde una remerita puede llegar a tener cuatro o cinco etiquetas casi tan grandes como toda la prenda, y con varias leyendas. Aunque para desgracia, vienen con màs indicaciones que dibujos. Algunos se deducen, otros, sólo sirven para oscurecer el panorama. Ciertas marcas, para complicar màs la situación, vienen con los íconos y las instrucciones bordados, y la letra es tan chiquita y apretada que parece Braille, pero sin el relieve. Imposible de decodificar.

Tras varias tareas de investigación, descubrí que el triangulito significa CLORO (lavandina, para nosotros). Otros, usan uno más fácil: un triangulito con la abreviatura Cl. Si se acuerdan de las clases de la imbancable profesora de química, sabrán que Cl es cloro. Misterio develado, pero por un rato. En algunas etiquetas, ese triangulito está pintado de negro, y significa que se puede agregar suavizante a la prenda. Y así, triangulito blanco, es CLORO. Triangulito negro, ¡es SUAVIZANTE!

Y hay más: el círculo parece ser limpieza a seco, y si tiene una raya debajo, significa limpieza a seco, con restricciones. Es tan, pero tan claro, que hasta un niño lo puede entender. ¿Quieren más? Un círculo con un punto en el medio, inscripto en un cuadrado, es, obviamente, CENTRIFUGADO SUAVE.

El tema de la plancha es otra pesadilla. Auque el ícono es por demás explìcito, para algunas marcas, la plancha con dos puntitos adentro significa TIBIA. Para Levi’s, dos puntitos es CALIENTE. ¿Y la plancha con tres puntitos entonces qué significa, que estamos en el infierno? ¿En qué quedamos, muchachos?

Luego de tanta pesquisa, logré descifrar el misterio del cìrculo inscripto en un cuadrado. Evidente: SE PUEDE SECAR EN SECARROPAS. Menos mal, ahora sé què tengo que hacer con mi campera de duvet.

Les presento ahora las peores de todas: una especie de sobre con solapas redondeadas, quiere decir SECAR COLGADO, pero otros fabricantes, lo traducen como COLGAR A LA SOMBRA. Y el primero entonces, ¿por què no trae el dibujito del sol?

El ícono del cuadrado con rayitas, que parece la rejilla del baño, significa TENDER SIN ESCURRIR, pero algùn demente tambièn puso en una etiqueta SECAR COLGADO. (¿No era el del sobrecito?)

Y el último tormento, es un cuadradito con una raya en el centro. Obviamente, es SECAR EN PLANO HORIZONTAL SIN TENDER. De solo mirarlo, uno ya se da cuenta. ¿Más claro? Echale agua. O mejor no, por si se nos moja la ropa de nuevo.


Luego de este breve instructivo, estoy en condiciones de lavar todo tipo de prendas. Y ya soy una experta en egiptología, aunque un poco mareada de tanto leer jeroglìficos. Pero ante tantas contradicciones, sólo quiero suplicar a los fabricantes de indumentaria: Por amor a Horus, Isis y Osiris ¡pònganse de acuerdo, por favor!

sábado, 3 de octubre de 2009

Leyes de tránsito


Escribo esto desde Ushuaia, mientras miro nevar desde la ventana. ¡Qué lindo es tomarse unos días de vacaciones! Me gusta llegar y ocupar los placares y cajones vacíos, o disponer todo el arsenal de cosmética y perfumería en los estantes del baño.

Estamos con un grupo de amigos, lo que hace que todo sea bullicioso y divertido. Las cenas son dignas del canal Gourmet: panes tibios (muchos) untados con pastitas sutiles y gustosas. Vinos requete ricos (muchos) que te impiden rechazar el refill de la copa. Entrada, plato, postre, café, masitas (muchas). A todo decimos que sí, para volver rodando hacia el hotel, con la panza llena y el corazón contento. Y así durante un par de noches. Todo fantástico, ¡qué geniales que son las vacaciones! (¿ya lo dije, no?).

Pero ellos, los hombres, cada mañana parten con su libro, revista o diario, a reflexionar mientras alivianan sus tripas, su organismo, su conciencia. ¿Nosotras? Miramos la tele y hojeamos la revistita, esperando inútilmente el llamado de la naturaleza. Lamentando una y mil veces haber ordenado esos fettuccini a los cuatro quesos. Es que los hombres no extrañan ni su cama, ni su almohada ni su baño. Para nosotras, en cambio, la geografìa incide directamente sobre nuestras hábitos más íntimos. Y ese lugar que nos es tan ajeno, no propicia para nada la liberación de la mente, entre otras cosas.

Después de todo un día de ski o excursiones, ¡otra vez tenemos hambre! Y el programa es ir a aquel restaurante de los mariscos imperdibles. Pero hoy elegimos de la panera los bollitos integrales, por eso de la fibra. ¿La pastita para untar tiene queso? Pasamos. ¿El vino estriñe? Por las dudas, agua mineral.

El mozo recomienda el risotto di mare, especialidad de la casa. Todos al unísono dicen "yo quiero eso". Nosotras reaccionamos como si estuvieran hablando del hijo de Bin Laden y Yiya Murano. Y elegimos el salmón grillé con vegetales ídem: mucha fibra. De postre, ensalada de frutas: más fibra. Y así rumbeamos a dormir, casi deslizándonos por la calle con suavidad, con la conciencia tranquila y el interior fibroso. Los demás van pesadamente calle abajo, contentos y ensayando cantitos de cancha.

Las noches se suceden más o menos parecidas, aunque variando el menú: hoy cordero, mañana merluza negra, pasado cazuela de centolla. Más los panes, los vinos, las masitas. Pero nosotras, ¡meta fibra! Tanto que ya estamos a punto de engullirnos los individuales de bambú, a ver si ayuda.

Y llega el momento feliz en que el cosmos resuelve favorecer a nuestros intestinos. El tránsito lento, hasta hoy paralizado por una serie de piquetes gastronómicos, decide comenzar a circular. Al cuarto día de “Atrapados, sin salida”, algo pasa. ¡Aleluya, hemos derrotado al enemigo!

Pero ¿es que en estos días habremos mutado en cabras? ¿En "eso" se convirtió todo lo que comimos? Y bueno, peor es nada. Y con gran satisfacción y calma espiritual (e intestinal), volvemos a pensar en los pancitos de la otra cuadra. Eso de la levedad del ser, es sin duda algo muy bueno; Kundera no entendía nada sobre leyes de tránsito.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Diseños del enemigo


Decididamente, hay algunos objetos diseñados para complicarnos la vida. Los sachets de ketchup y mayonesa de los locales de hamburguesas, por ejemplo. ¿Cuántas veces tratamos de tirar del plastiquito dentado sin éxito? Se supone que donde dice "Abra aquí" tiene un troquelado, una línea de puntos o alguna parte vulnerable que nos permita rasgar el sachet. Pero no: los muy condenados redoblan su esfuerzo y toman la consistencia del caucho más resistente y elástico. Invariablemente optamos por sostenerlo entre los dientes y dar un tiròn. Mi odontólogo no está del todo conforme, ya que alguna vez fui al consultorio con el pedacito de diente roto. Ese día me preguntó si yo sabía lo que era un cuchillo, una tijera o un cutter. La verdad es que desde entonces ando con la Victorinox en la cartera, por las dudas.

Los sachets son un invento de los seres maléficos. Al igual que con la mayonesa, el champú y la crema enjuague son imposibles de abrir en la ducha. Esta vez el vapor, el jabón y el apuro empeoran la situación, tanto que a veces, no se puede ni con los dientes porque se patina. Cuando yo era chica, el Sedal venía con una especie de capsulita en la punta que había que retorcer, se abría enseguida, y no había necesidad de entrar a la ducha con armas blancas.

Pero de todos los objetos malignos, los peores son los paquetes de galletitas. Me pregunto para qué dice "Abra aquí", por qué le ponen esa cintita colorada y esa inútil muesca en el borde del papel. Si uno tira de ahí, no pasa nada. Entonces interviene el Tramontina: hay que calcular más o menos a qué altura del envase termina una galletita y empieza la otra, para asestar ahí la puñalada certera y cortar el papel. Más de una vez, el cuchillo fue a parar en medio del relleno de una Melba o Sonrisa, y no entre dos galletitas como intentaba. Para peor, una vez abierto el paquete aparece burlona la cintita colorada como diciendo "ves que estaba acá, tarada".

Hay otros objetos que no son tan malditos pero sí ingratos. El pomo de cemento de contacto, por ejemplo. Si no lo limpiamos bien después de usarlo, al tiempo ya es imposible enroscarle la tapita porque está lleno de pegote alrededor del pico, tan adherido que no se puede despegar, ni cerrar, ni nada. El de “La gotita”, se tapa, se seca y tiene que ir a la basura, a menos que con una aguja y toda la paciencia del mundo tratemos de hacer fluir el pegamento. Dejo para el final el frasco de cola de carpintero, adhesivo de empapelar o similares. Son esos productos que pegan de todo menos plástico. A excepción del plástico de la tapa del envase; ese sí que se pega fantástico al pote. Y queda firme como rulo de estatua, tanto que más de una vez es imposible abrir y usar el pegamento.

Todos estos son sin duda, objetos diseñados por el enemigo, al solo efecto de complicarnos la vida. ¿Tienen otros?

lunes, 27 de julio de 2009

Niguiris y gomitas para el pelo


La semana pasada estuve en el barrio chino de Belgrano, en la calle Arribeños. Fui en busca de algunos ingredientes para cocinar, con la idea de que ahì era màs fresco, màs variado y màs barato.

Lo de màs barato, creo que a esta altura es una leyenda urbana. Muchas veces uno tiene la ilusiòn de que porque son chinos, todo lo que venden es casi regalado, y hasta aventuramos imaginar que como no entienden... no saben. ¡Craso error!, dirìa Mariano Grondona. ¡Mingaaaaaaa!, dirìa Lita de Làzari. Son màs vivos que vos y yo juntos, y cada vez que la cosa se les pone castaño oscuro te miran desconfiados (que mucho no les cuesta por la forma de sus ojos naturalmente rasgados). Y ahì nomás te dicen: "Nontendo", que en porteño significa no entiendo. Pero cuando la cosa es al revès, y existe una mìnima posibilidad de que quede un centavo a tu favor, ahì pasan a ser eminencias del sistema cambiario mundial, unos sabelotodos de la numismática. Así son estas dos caras de una misma moneda, china y ¿por què no? con agujerito en el medio, de esas que se usan en el Feng-shui.

Asi fue que en mi tour de compras conseguì todo lo que necesitaba, y tengo que reconocer que habìa buen surtido y calidad. Traje todo lo de la lista: algas, ajinomoto, sèsamo blanco y negro, wasabi, salsa de soja, salmòn, harina integral superfina. ¡Y tambièn un abanico, gomitas y hebillas para el pelo, una linterna a dínamo y tres docenas de sahumerios!

Se preguntaràn ustedes què clase de receta combina pescado con gomitas para el pelo. Ninguna, claro està. Pero se apoderò de mì esa manía de entrar en esos negocios que venden chucherìas baratas, y llenè el canastito de artìculos que no necesitaba. ¿Quièn puede reconocer que nunca lo hizo?

Algo por el estilo pasa con las promociones de los mièrcoles en los shoppings. Esos dìas aprovechamos para comprar los regalos de cumpleaños de las amigas, asì podemos elegir algo mejor por un precio màs conveniente. Un ahorro con mejoras. Hasta acà, todo bien. El problema empieza cuando, ya que estamos, nos compramos algo para nosotras. Al diablo con el ahorro y el 15% de descuento.

Otra calamidad son las liquidaciones. Como con el abanico y la linterna, más de una vez volvì a casa con un sweater que ni siquiera me convencìa del todo. ¡Pero estaba tan barato que me daba làstima no aprovechar! Y ahì se quedò, durmiendo para siempre en el estante.

Pese a todo esto, hasta tengo un argumento justifica nuestra conducta. En la prehistoria, mientras el hombre se iba a cazar animales para comer, la mujer se quedaba en la cueva con los hijos y de paso juntaba frutos y semillas. Cada mièrcoles en el shopping, nosotras obedecemos nuestros instintos más ancestrales. Sencillamente, ¡estamos recolectando! Sin lugar a dudas, es una cuestiòn de supervivencia.

domingo, 19 de julio de 2009

Las peripecias de la mesa cuadrada


Hoy mis hijos ya están festejando el día del amigo. Parece que ahora se hace en la víspera, para empezar esa fecha todos juntos, ¡pero la noche del día D se vuelven a juntar! Festejos por todos lados, y es entendible, ya que para ellos los amigos son más importantes que el aire.

Para entender tanto desborde, sólo hay que tener buena memoria y volver a aquellos tiempos en que nuestra madre sólo sabía de cocina, fósiles y tiranosaurios. Hoy los tiranosaurios somos nosotras, que tenemos que hacernos invisibles cuando nuestros hijos están con sus amigos, y curtir perfil bajo cuando osamos aparecer ante ellos…Pero no los critico, y me consuela pensar que ya les tocará mañana, cuando tengan sus propios hijos. ¿Cómo era, la venganza es un plato que se come frío? Ya van a tener su antipasto, ensalada o cualquiera sea lo que elijan del buffet froid que les va a llegar tarde o temprano.

Mañana yo también voy a comer con mis amigas, y ya me estoy imaginando esa reunión de mujeres. En primer lugar, siempre es bueno tratar de conseguir una mesa redonda, de las que en general no abundan. Si no la hay, la mesa alargada es un problema, sobre todo si las comensales rondan la docena. Entonces, suele haber situaciones como las que siguen:

A B C D E
(-------- esta es la mesa de amigas
F G H I J

* (A) habla con (G) sobre un tema en particular

* Al mismo tiempo, (B) habla con (F) de otro asunto. Todo esto al unísono, de modo tal que TODAS tienen el zumbido de la conversación de al lado que versa sobre otra cosa. Y para peor, se mezclan un poco las palabras

* Sucede que en algún momento, la conversación entre (A) y (G) se gasta y no da para más, pero por algún motivo se siguen redondeando los mismos conceptos. De pronto (A) escucha que las de la otra punta de la mesa (D, E, I, J) se ríen muchísimo, entonces trata de captar algo de lo que pasa, mientras deja una expresión de “te estoy escuchando” para que (G) no se ofenda y la mande a planchar mondongo. Es como dejar la cara pero irse con la mente y las orejas al lugar de la mesa donde pinta más divertido.

* Las de la punta siguen cacareando y se ríen mucho. Tanto que (B), que estaba enfrascada en su charla, quiere saber de qué se trata y pregunta tomando lo último que logro escuchar ¿Qué pasa con tu suegra? Y ahí le tienen que contar tooooda la historia de nuevo para que entienda lo que pasa con la suegra, o le dicen llanamente “puf, ya contamos todo, después te explicamos”.

Y así sigue la cosa, pero siempre la reunión de amigas es super divertida, aunque no se pueda hablar con todas. En general, hay que agarrarse a las de cerquita ya que ese imposible estar en todos los temas. A veces, hasta parece que la charla es más divertida en la otra punta de la mesa, como cuando en un restaurante el plato que le llevan a otro es más tentador que el que pedimos nosotros. Gataflorismo, así se llama.

De vuelta a casa, sentimos que no cruzamos una sola palabra con I, ni con E, ni con J, ni con D. Pero como las queremos, sigue siendo una fiesta cada vez que salimos todas juntas a celebrar. ¡Feliz dìa a todas mis amigas!

viernes, 10 de julio de 2009

No te puedo ni ver


La semana pasada estuve leyendo el nuevo blog de un amigo que vive lejos, y sus palabras me hicieron llorar. Pero no de emociòn; ¡el muy desgraciado eligiò un diseño de fondo negro con letras blancas! Tratar de descrifrar esas letritas entre tanta oscuridad - sumado al brillo del monitor - me dejò con dolor de cabeza, los ojos brillosos y hasta un leve mareo.

Algo asì me pasò en la peluquerìa, con una revista con ese tètrico diseño de blanco sobre azul noche. Pero ¿què les pasa, diseñadores gráficos? Esas combinaciones son un atentado a la salud de la córnea y el cristalino. Y al amor propio.

Otra misión imposible es la de reconocer los frascos de shampoo y crema enjuague en la ducha. Entre el vapor y las letras diminutas, es difícil diferenciarlos, a menos que una ya haya aprendido cuál es el de tapa blanca y cuál el de tapa azul. Para peor, no podemos bañarnos con lentes, y si lo intentàramos, el vapor harìa que los cristales se empañaran al toque, imposibilitando todo intento de lectura. Entonces, no queda otra que tomar el frasco con desconfianza, mirando en què parte de la etiqueta dice de què producto se trata. Después sólo resta focalizar si la palabra es corta o larga. Así sabremos fácilmente cuál es cuál. Problema solucionado, si es que no nos confundimos, en medio de la niebla, con Industria Argentina o Contenido neto.

De chica me causaba gracia ver a mi abuela tratando de enhebrar la aguja. Le pasaba con el hilo un par de centímetros por encima o por debajo. Cuando se pudrìa y me pedìa ayuda, yo lo hacía en dos segundos. Hoy si no tengo los anteojos a mano, estoy diez minutos jugando a ver si puedo. Y si no andan mis hijos por ahì, tal vez me quede sin coser. Tratè de enseñarle a mi perro, pero me resultò medio animal con estas cosas de la costura. Por eso es que la mayorìa de las veces, coso los botones con la aguja de la lana y chau. Son puntadas de diseño, di-seño-ra que no ve un corno.

Mi otra abuela, que era re coqueta, no salía sin maquillarse. En los últimos tiempos, cuando no veìa bien y el pulso le temblaba un poco, sus ojos parecìan un electrocardiograma, donde el delineador subìa y bajaba sobre el pàrpado en lugar de ser una fina lìnea bordeando las pestañas. Hoy la entiendo tanto...

Por suerte, se inventaron los lentes que permiten levantar uno de los cristales para maquillarse, como esos horribles corpiños para amamantar en los que sacàs una tapita. Y tambièn tenemos los espejos con doble aumento, en los cuales te ves perfecto el ojo. Y las arrugas, las lìneas de expresiòn y los puntitos negros, magnificando las impurezas de la piel como si fuera la superficie de la luna. Son asquerosamente reveladores, aunque ùtiles.

Dicen que los años traen experiencia. Y es verdad: ahora aprendì lo que es dioptrìa, colirio, astigmatismo y miopìa. Y sì, hay que resignarse a usar los lentes màs de una vez. Lo que tienen de bueno, es que las cosas lindas, las vemos más grandes. Eso sì que es genial, ¿o no?

viernes, 3 de julio de 2009

Máscaras de ensalada



En cada cambio de estación las revistas empiezan con los tratamientos shock para revitalizar la piel y prepararla para la nieve/las flores/el sol/la caìda de las hojas de los àrboles, segùn corresponda.

Vimos muchas veces fotos de una preciosa modelo, con un turbante de toalla blanquìsima y esponjosa. Sobre los pàrpados, dos rodajas de pepino, tomate, frutilla o rabanito. ¿Quien no se ha tentado alguna vez, pensando que con sòlo llenarse la cara de vegetales íba a quedar así de linda?

Tal vez con la firme convicción “yo quiero quedar como ella”, hasta hemos preparado concienzudamente las rodajas de pepino para aplicar sobre los ojos cansados, con la ilusiòn de que las vitaminas y los flavonoides nos devuelvan la lozanìa perdida con los años, el stress o el trajinar de la semana.

Así, nos preparamos en un cuarto en semipenumbra, con mùsica New age, ruiditos de agua que corre, pàjaros y viento. En la mano, un bowl con las rodajas frìas de tomate. En la cabeza, el turbante hecho con una toalla verde o rosa. Las blancas y esponjosas son para los hoteles, las peluquerìas y los Spa. En las casas siempre son de colores pastel, a menos que una haya comprado todo net, en medio de un ataque minimalista.

Estamos entonces con los pepinos o los tomates en la punta de los dedos, tanteando a ciegas para embocarlos en los pàrpados cerrados. Menuda tarea: la rodaja es plana, el ojo es convexo y ofrece una pequeña superficie de apoyo. Resultado: el pepino queda bailando sobre el pàrpado, y no puede regalarnos sus propiedades mágicas. Con paciencia, y siempre a ciegas, vamos modelando el vegetal hasta que se amolda a las redondeces de nuestro globo ocular.

¡Horror! Con la presiòn el pepino empieza a largar su juguito que nos cae por el borde del ojo, las orejas, el cuello y finalmente la almohada. Es que nos olvidamos de colocar una toalla para proteger la cama, ¿quién toma tantas precauciones?

Nuevamaente hay que sacarse a tientas las rodajas, ahora babosas y tibias, meterlas en el bowl, limpiarnos el juguito, tirar todo al diablo y darnos una ducha para ir a la farmacia a comprar una buena crema hidratante y dejarnos de pavadas. Pepinos, tomates, frutillas, ¡a la ensalada, de donde nunca debian haber salido!

domingo, 28 de junio de 2009

Lugares comunes


Uno de los temas recurrentes en los talleres literarios es escribir claro y sencillo, sin hacerse el Cervantes. Un desborde de vocabulario no es para cualquiera, y puede terminar en una maraña barroca imposible de leer. Otro vicio con el que te machacan para que evites es el de los lugares comunes, como "las làgrimas que rodaban como perlas por sus mejillas" (¡puaj!).

Esta semana se me fue la mano: de tanto hacer los deberes, y por no caer en lugares comunes, me olvidè de mencionar lo ineludible: el dìa del padre, y la muerte de Fernando Peña, que me encantaba. Así fue que no escribì nada sobre ellos, pero va aquì mi recuerdo, a cada cual en su categorìa y en la magnitud que ellos saben.

A otra cosa. Uno de los lugares comunes que más me fastidian es el de esos viajeros que cuentan: "hicimos Florencia, Venecia y Siena, y despuès hicimos Atenas y Estambul". ¿Què te pasa, Clarín? Uno no hace Siena como si se tratara de una torta, ¡ya està hecha y desde hace varios años!

No termino de entender què ciudades califican para ser hechas. Por ejemplo, nunca escuchè que alguien dijera "hice Mar del Plata, Miramar y Sierra de los Padres". ¿Será que el itinerario tiene que empezar en Ezeiza? Es un misterio.

Ahora las dejo, chicas, me voy a hacer una torre, pero no de Pisa sino de panqueques. ¡Buenas noches!

viernes, 19 de junio de 2009

Tres no es multitud


Hoy tuve dos invitaciones para ir al cine: una de mi novio y otra de una amiga. Como no me gusta contrariar, les dije a los dos que sì.

Al rato, como soy una ridìcula rollera me puse a pensar què le parecerìa a mi amiga venir con nosotros. E hice un flash back de mi vida, unos seis o siete años atrás. Mis diàlogos internos eran: ¿pero què tengo que hacer yo con ellos, que son una pareja y yo voy ahì de miércoles, siempre en el medio? ¿Será que me invitan porque les da làstima que estè sola? ¿Y què hago al momento de pagar? Nunca me dejan pagar mi parte y a mì me da vergüenza, parece que ademàs de sacar a la solterona tienen que hacerse cargo de sus gastos..."

Estas y varias otras ridiculeces eran las que me ponìa a pensar cada vez que alguna pareja de amigos me invitaba a salir con ellos. Un horror. Un día, acuciada por mis meditaciones le preguntè a una de las samaritanas que me sacaban a pasear, còmo se sentìa de salir con mochila (yo era la mochila). Pacientemente, ella me explicó que despuès de algunos años, dècadas, semestres, lo que sea, de tener una pareja estable, es divertido incorporar a otras personas a las salidas. Que era algo asì como refrescante.

¿Saben algo? Creo que ella tenìa razón. Y no porque la salida de a dos sea aburrida (dentro de diez años les cuento, por ahora no lo son), sino porque aporta algo distinto, otro punto de vista, experiencias, etc. Digamos que la ida al cine, de la que hubo y habrà montones, al ser de a tres tiene otra dinàmica y està re bueno.

Espero que mi amiga no sea tan absurda como yo, y que no empiece con las cavilaciones. Ojalà que sea màs simple, y que venga con nosotros al cine, que lo vamos a pasar re bien. Y que no me diga que no va a poder venir porque tiene que comprarle la comida al loro (cuando las dos sabemos muy bien que NO TIENE LORO).

Buen finde para todos. Despuès les cuento.

lunes, 15 de junio de 2009

Indicios inequìvocos


Todo empezó cuando decidimos ir al centro en busca de un programa distinto, porque queríamos ver algo de jazz, tango o algo por el estilo. Después de buscar en la web, encontramos una banda llamada Blues Motel, en La Trastienda de la calle Balcarce. Sacamos las entradas por Ticketek y allà nos fuimos, a esperar que se hicieran las 12 de la noche. Ya sé que era un poco tarde, pero el combo bohemia/sábado/San Telmo merecìan ese sacrificio, ¡que le vamos a hacer! Mientras tanto, fuimos a cenar y sobre la hora llegamos al lugar. En la vereda y en el hall, había chicos de entre 18 y 25 años, con rastas, atuendos dark, peinados raros y piercings. Confieso que mirè la cartelera por las dudas: Blues. "Què raro que no haya gente de nuestra edad", decíamos. Mi novio y yo somos de mente abierta pero poco tenemos de progres-transgresores, y empezamos a sentir que algo estaba fuera de lugar. Nosotros.
Finalmente entramos a la sala y vimos que la cosa era de parado. Cuando empezò el show, cinco muchachos disfrazados de modernos arremetieron con un rock estridente onda Callejeros. No puedo decir que no nos gustò, la mùsica era pegadiza y alegre, y a la tercer canciòn decidimos ir al Cafè Tortoni, para codearnos con nuestros contemporàneos.
Moraleja: hay que prestarle atenciòn a los indicios. Por ejemplo, si un show es en San Telmo y empieza a medianoche, por màs que se llame Tributo a Matusalèn...¡seguro que no es para nosotros! Despuès que no vengan con eso de no-te-avisè...

viernes, 5 de junio de 2009

la madre de Frankenstein


Hola chicas. Finalmente...me engripè. No creo que sea porcina, sólo una gripe común pero suficiente como para sentirme cansada, con fiebre y dolor de huesos, uñas, pelo, piel etc. Los chicos, en casa de vacaciones forzadas.
Antes de seguir, quiero hacer una aclaración: las que me conocen saben que yo a mis hijos los adoro, pero tengo que confesar que son tres monstruos. ¿Cómo puede ser que la vean a una despeinada, en pijama a las 4 de la tarde, con los cachetes colorados por la fiebre, ojerosa y cansada y pregunten "Mááá, qué pasa con la comida" como si nada? Lo malo, malìsimo, es que ni se les cruza por la cabeza pensar en que mamà se siente mal o no tiene todas las pilas como para hacerles ravioles caseros justo en ese dìa.
Ni que hablar de ofrecerte un tecito, o en un rapto de locura filial...lavar los platos del almuerzo. Ahì yace el cementerio de fuentes, tazas, vasos y jarras esperando que la fiebre nos afloje para calzarnos los Pirelli y empezar a lavar con energìa.
Sé que no soy la ùnica; siempre recuerdo las quejas de una amiga que habìa pasado por el quiròfano (involuntariamente) y esperaba que los hijos le alcanzaran un tè a la cama. A ella le encanta poner la taza inglesa con su plato y hasta el mantelito de broderie debajo, la cuchara de plata y la sacarina en una cajita primorosa. Bueno... sin esperar tanto, le llevaban el mug màs horroroso de la cocina, cachado y viejo, sin platito, sin cuchara, sin azùcar, ¡sin amor!
Por eso es que me siento la mamà de Frankenstein, el Hombre Lobo y la Bruja de Hansel y Gretel. ¿Què tipo de monstruos hemos creado, que no son capaces de reparar en nosotras cuando estamos mal?
Recuerdo que a mi mamà, cuando la veìa enferma, le llevaba el desayuno a la cama, le lavaba los platos para tratar de ayudar y esas cosas. Pero hoy...estàn todos muy ocupados mirando sus ombligos y exigiendo màs y màs a cambio de nada. Digo yo... ¿cómo llegamos a parecernos tanto a Neurus? ¿Qué fue lo que hicimos mal? ¿A ustedes tembién les pasa?

sábado, 30 de mayo de 2009

Volver a la aldea


¡Hola chicas! Les cuento que esta semana anduve por varias calles de Belgrano, cerca de Barrancas. Pasè por mi colegio, en la calle Federico Lacroze, y descubrì que en esa misma cuadra, una casa divina tipo petit hotel se habìa convertido en un nuevo colegio de nombre tipo nosequè Hills, o nosecuanto Oaks. No sè qué pasa con los colegios de ahora que se llaman todos parecido: basta con agrupar un par de adjetivos y sustativos, y ya tenemos el nombre. San Alguien of the Hills, Oak Hills, Green Hills o Cachamai Hills, la cosa es que sea en inglès, para que parezca prestigiso y bueno.
Pero el tema era otro, me distraje con la observaciòn. Lo que querìa decirles, es que despuès seguì caminando por esas calles, y vì que el Banco Provincia de Luis Marìa Campos, al que acompañaba a mi papà a hacer tràmites no está más, y el local dice "Se alquila". El Nike de Lacroze tambièn cerrò, al igual que la heladerìa a la que ìbamos al mediodìa antes de entrar a clase.
Es un poco triste ver que los lugares a los que ìbamos de chicos ya no existen o son màs feos de lo que nos acordàbamos. Una vez volvì a la casa que era de mis abuelos, y la vi chiquita y vieja, ¡y zas!, se me borrò ese recuerdo tan lindo que tenìa.

Los viejitos sabios dicen algo asì como "No vuelvas a aquèl lugar en que una vez fuiste feliz". Porque nos puede pasar como con la casa de mi abuela. Una amiga me contò que su marido volviò a un club de golf en Suiza en el que empezò como profesor,y sólo encontró un yuyal y unas casillitas de madera hechas bolsa. Error. Error. Estos viajes al pasado en general nos deparan sorpresas mas bien feìtas.

¿Què aprendí con todo esto? Creo que es mejor vivir mirando para adelante, y dejar lo pasado en un rinconcito de los recuerdos. No tratar de revivirlos sino dejarlos como combustible cuando tenemos alguna nostalgia, y nada màs.

¿A alguna de ustedes le pasò lo mismo? ¿Me quieren contar? ¡que tengan un buen finde!

El que me toca es un chancho


Finalmente llegò la gripe porcina a Pilar. Tanto lìo con Mèxico, ir a Ezeiza con barbijo, usar alcohol en gel, no saludar a las amigas con un beso...està acà presente como el frìo y las campañas polìticas, o sea...un garròn.
Los chicos estàn felices porque se sienten de vacaciones, y los profesores nos bombardean con mails de "tarea para el hogar". Yo con tres estudiantes, me paso el dìa imprimiendo los ejercicios que les mandan. Se trata de hacer una especie de educaciòn a distancia, pero andà a decirles a los chicos que en vez de prender la tele o ir de visita a lo del vecino, agarren la hoja y le entren a las ecuaciones y al lab report. ¡Imposible!
Hoy ademàs no hay tiempo libre, estamos todos adentro y cada vez que alguien estornuda empieza la diàspora por las dudas.
La duda para mì es si el resfrìo de mi hijo se volverà "porcino" o será solo una gripe comùn. Asì que, chica pilarenses, estamos de vacaciones. Pero no viajamos a ningùn lado, salvo al consultorio del pediatra y a la farmcia. Y dentro de poco, a comprar màs cartuchos para la impresora que ademàs, estàn carìsimos. buaaaaaaaaaaaaaaa.

domingo, 24 de mayo de 2009

El sol del veinticinco


Se acerca el 25 de mayo y me acuerdo de los actos del colegio. ¿Quièn no? Como yo era de las màs altas ¡siempre me hacìan actuar de hombre! Y me tocaba bailar el pericòn o una especie de minuè, con una camisa de puntillitas, pantalones apretados y botas. Yo querìa ser dama antigua, con esos vestidos llenos de volados, miriñaque, peinetòn, mantilla y abanico. Pero no, nunca zafaba del "Vos sos uno de los caballeros". Ademàs, las que elegían para dama siempre eran las rubiecitas con el pelo lleno de bucles. Decididamente, no es mi look. El resto de los chicos eran vendedores de velas, escoberos, serenos, lavanderas y las negritas que vendìan "Mazamorra caliente, para las viejas sin dientes". ¿Alguien sabe què corno es la mazamorra? Recién lo busquè en la web, es una especie de arroz con leche pero que en vez de arroz lleva maìz blanco. Frustraciones aparte, como la vida siempre nos da nuevas oportunidades, en la primera ocasiòn que tuve (ya grandota) ¡me disfracè de dama antigua en un acto de colegio que le hicimos para los chicos! No era cuestiòn de quedar con el trauma, ¿no? Es como dicen: mejor arrepentirse de lo que uno HIZO que de lo que uno NO HIZO. ¡Hay mazamorra caliente, que quema los dienteeeees!

(Nota: si quieren enviar comentarios, seleccionen la opción Nombre URL. No hace falta poner este ultimo dato).

sábado, 23 de mayo de 2009

El torneo fue un éxito



Hola chicas. ¡No se imaginan lo bueno que estuvo el torneo! Vinieron 178 jugadoras de todos los rincones, hasta de Uruguay y Gualeguay (que además salieron campeonas). Nos vamos para arriba, ya tenemos un torneo in-ter-na-cio-nal. El dìa se puso de nuestro lado y hubo sol desde la mañana. Arrancamos con un super desayuno, con unas facturas riquìsimas que nos regalaron los empleados de la proveedurìa (que pagaron de SU bolsillo, son un amor). La definiciòn de los partidos se extendiò un poco, tanto que las jugadoras se amontonaron muertas de hambre a la hora del tè. Los sorteos estuvieron buenìsimos, y habìa tantos premios que casi todas se fueron con su regalito. La logìstica del torneo contò con la colaboraciòn desinteresada de Matìas Galella y sus muchachos, que armaron los equipos y coordinaron los partidos. Asì evitaron que la cosa fuera un caos. Las ganadoras fueron:
Categoría A: 1ras.: Silvia Moràn - M. Lusquiños- 2das.: CRISTINA Y MERCEDES DELIA (LAGARTOS)
Categoría B1:1ras.: Gabriela Sarboli - Silvina Orlando (Bco.Provincia) - 2das.: Graciela Tovillas - Fabiana Pascual (Los Horneros)
Categoría B2: 1ras.: Aurora Càseres - Marta Suarez (Gualeguay) - 2das.: Norma Cobre - Miriam Campbell (Gualeguay)

Tuvimos tambièn algo de shopping, en unos gazebos con ropa, bijou, make up, zapatillas y cremas. Una empresa de eventos organizò unos partidos de mini tenis que parecìan fàciles, pero se complicaban al tratar de pasar esa pelotita gigante que no picaba.
Fue un dìa genial, y lo màs importante: logramos una buena recaudaciòn, que va a ayudar a poner contentos a muchos chicos del hospital de Del Viso. Gracias a todas las que participaron y ayudaron a concretar nuestro sueño. Un saludo.

viernes, 8 de mayo de 2009

El preámbulo: la oración del día


Hola chicas. Hoy tuvimos una dramática charla con la genia de Malú Kikuchi, quien es además vecina del club. ¿Por qué dramàtica? Personalmente porque cuanto más me entero, más me preocupo. Me doy cuenta de que las reglas se cambian a cada paso, de que nadie me asegura la legalidad. No quiero darle un tinte político a este espacio, se supone que debe tener glam, ser entretenido y darnos pilas. Pero la verdad es que hoy me cuesta un poco. Como sea, hay una luz de esperanza: podemos participar. Sé que no es divertido usar un domingo para ser fiscal de mesa en un colegio de Zelaya. Pero como dijo Malú, a este paso, vamos a ser igual a Zambia, con perdón de sus habitantes. Así que parafraseando al mítico Tato Bores, "No se queje si no se queja". Todavía podemos hacer algo por nosotros y por nuestro país. La gente de la Coalición Cívica http://www.partidogen.com.ar/ tiene un sitio en el que te explican cómo se puede participar.
Por el resto, la charla estuvo re buena,contamos con un aporte muy interesante de la Dra. Susana R. de la T. que nos aclaró algunas dudas, leímos y comentamos ciertos artículos de la Constituciòn. Como cierre, que fue muy emotivo, "recitamos" el Preámbulo desafiando, en algunos casos, a nuestra adormecida memoria de la etapa escolar (Yo me lo acordaba todo. ¡Gracias, señorita Susana Liendo! Q.E.P.D.). La cosa es que ahì fue cuando nos dimos cuenta de que estamos en un berenjenal. Pero por suerte, creo que se puede cambiar. Basta por hoy, nos vemos la próxima. Buen finde para todas.

jueves, 23 de abril de 2009

Super torneo de tenis en LLCC


Se viene el clásico Torneo de Tenis de Los Lagartos, el viernes 15 de mayo, a las 9 hs. Doble damas, categorías A - B1 y B2

Te esperamos en Los Lagartos C.C., ruta Panamericana, ramal Pilar Km.46

Inscripciones: email lgiani@telviso.com.ar; cisnerosm@telviso.com.ar
Celulares: PATO BELLUZZO 011 15 40465108 - LILY GIANI 011 15 53180172

Nuestro torneo es a beneficio del Hospital de Pediatría de Del Viso, y lo organiza el Polo Educativo de Pilar.

La inscripciòn es de $ 60 por tenista, que te incluye el desayuno y nuestro té, con el clàsico sello de Los Lagartos. Ni que hablar de los sorteos y los premios: im-pre-sio-nan-tes. No te vas a arrepentir.

domingo, 19 de abril de 2009

La fiesta de M.


Estuvo bàrbara, y el dìa acompañò. Hubo tres sectores bien marcados: el del living, màs serio y tranquilo, con la mamà y las primas tìmidas y la cuñada. El del centro, con las chicas del colegio, que debatian sobre el sí y el no de los cyber encuentros. El de afuera, con las gordas, cerca de los mozos, que nos traìan unas pizzas buenìsimas. By the way... las tortas tambièn estaban afuera, asi que probamos de todo. Cantamos, nos reimos, y hasta escuchamos . sin querer - un pedidos de alto voltaje de una de las chicas a su marido. Terminamos la tarde con una visita guiada a la huerta y, ya que estàbamos, le chusmeamos el jardìn a la vecina. Nos volvimos con algo de frìo, la panza llena de cosas ricas y una sonrisa de oreja a oreja. Lo mejor de la tarde: los regalos. El anillo y la estola son para la portada del Vanity Fair. Este año con ese look...la doctora M., ¡mataaaaaaa! Y ni que hablar cuando estrene las CINCO CARTERAS que recibió. Prüne està de fiesta por tanta venta.

sábado, 18 de abril de 2009

un viernes a full


Hola a todos! Ayer estuvimos en la charla de Historia del Arte en el House II de LLCC pero...el profe de religiones comparadas faltò. Y como estàbamos ansiosas por aprender, esta vez hablamos sobre nosotras mismas. Es que, en rigor de verdad, habìa un montòn de mujeres que yo ni conocìa. Nos pusimos en ronda y nos fuimos presentando de a una. Vero S. y Ana C. hicieron de moderadoras, y fue asì como me enterè del nombre de aquella señora que charla tanto mientras el profesor explica (ejem). Tambièn conoci a una divina que tiene ¡74 años! Viene con la hija y es una señora encantadora. Como sea, ahora todas nos presentamos en sociedad, y la verdad es que somos un grupo humano muy interesante. Pero el viernes pròximo, a ponerlos las pilas chicas, que hay clase.

A la tarde, estuvimos en el prometido cumpleaños de Gracielita, que se matò con un centro de mesa espectacular, lleno de rosas rosadas bien gorditas, con una vela cuadrada. Nos sentìamos en un casamiento re top. Comimos un poco de todo, charlamos todas con todas y a la vez. Pero fue un encuentro super amable, y como dijimos antes...lleno de libaciones (aunque hubo, tambièn, algunas infusiones, no se crean que fue todo etìlico el encuentro). Estuvimos programando una peregrinaciòn a San Nicolàs (200 km a pie) y evaluando si sirve o no sirve hacer este tipo de sacrificios. ¿Ustedes què piensan? Y ya me voy para lo de la doctora M. que mis chicos contaron que preparó unas cosas increìbles.

besos
Morocha

miércoles, 15 de abril de 2009

Estamos de cumpleaños


¡Hola chicas! Estrenamos este Blog a puro festejo: tenemos el cumpleaños de Gracielita M. que nos espera a tomar el té en su casa el viernes a la tarde. Ella dice, pero despuès no hay nada de infusiones, pero sì mucho de libaciones. Ustedes me entienden. Ojalà se anime a tocar el piano y la guitarra, asi podemos cantar estrenos como "Rasguña las piedras" o "Canciòn para mi muerte". (Charly Garcìa se querría morir si nos escuchara, estoy segura).
Como si esto fuera poco, la doctora María Eugenia festeja tambièn. Como es una ejecutiva hecha y derecha (es abogada, jeje) nos agasaja con un brunch. Lo bueno es que cocina como los dioses, asì que es mejor ir haciendo dieta desde ahora. Por suerte, antes del cumple, podemos pasar por la clase de Juan Josè, para ver si con la salsa, el merengue y el cha-cha-cha gastamos unas cuantas calorìas como para justificar la comilona. Nos vemos ahí, soplando las velitas.